miércoles, 11 de mayo de 2016

Lenguaje plástico y visual

LA ESCULTURA

Es el arte que se expresa a través de los volúmenes, en el que se juega con la materia que se adhiere o se sustrae, con lo vacío y lo macizo, con las calidades de las materias y la forma en que éstas son trabajadas tratando de convertir estos conceptos en poderosos recursos expresivos.

Cuando se habla de los tipos de escultura es posible distinguir entre la escultura de bulto redondo y el relieve. La de bulto redondo es aquella en la que la pieza se ha trabajado desde todos los puntos de vista, en torno a la que podemos girar, siendo el relieve aquel que es posible observar sólo frontalmente. El relieve se puede clasificar en:
  • Altorrelieve: en el que la figura sobresale más de la mitad de su volumen sobre la superficie en que ha sido realizada.
  • Medio relieve: cuando sobresale la mitad.
  • Bajorrelieve: cuando sobresale menos de la mitad.
Otro tipo de relieve consiste en quitar la materia de las figuras que se quieren representar de tal manera que éstas quedan en negativo, técnica esta que se practicó frecuentemente en el mundo egipcio.

En el caso de que estemos ante una escultura de bulto redondo podemos indicar dos categorías. La que se realiza añadiendo materia, como es el caso de la arcilla o el metal, o la que se ejecuta sustrayendo la materia como la piedra o la madera. Otros materiales escultóricos pueden ser el plástico, la escayola, el hormigón, el acero, la cera, etc. El arte contemporáneo incorporó a la escultura una innumerable cantidad de nuevos materiales, muchos de ellos totalmente inusuales, de los que se consigue extraer nuevas potencialidades expresivas.



Las técnicas que habitualmente se emplean en la escultura son las siguientes:
  • La talla que suele aplicarse a la madera. Este material presenta algunas diferencias con respecto a la piedra, aunque la forma de trabajarse es relativamente parecida, que hacen que frecuentemente se prefiera la piedra a la madera. La primera sería la limitación de las dimensiones de la madera y una serie de características físicas que hacen que sea un material de inferior calidad con respecto a la piedra (nudos, vetas, diferencias de color, oquedades, etc.).
  • El modelado que sirve para materiales blandos cuya forma se puede modificar con la simple utilización de las manos, añadiendo o quitando materia.    
  • El esculpido en el que se eliminan partes de un bloque previamente desbastado.
  • El pulido es el acto de trabajar en mayor o menor medida la superficie de una escultura. La manera en que una obra se pule puede tener una gran importancia, ya que está relacionada con la forma en que la luz se refleja sobre ella y con los efectos estéticos que se consiguen.
  • El vaciado que tiene como punto de partida la realización de un molde que transforma el material. Muchas veces se versa en éste la materia escultórica en estado líquido que posteriormente se endurece tomando la forma definitiva que le ha sido dada con el molde. 
  • El forjado en el que se golpean metales en frío o en caliente hasta que se les da la forma deseada.
  • El repujado se realiza sobre una lámina metálica en la que se efectúan incisiones que dan forma al dibujo que previamente con un molde se ha llevado a cabo sobre ella.
  • El estampado que se consigue imprimiendo con fuerza un troquel con figuras en negativo para que en la superficie del objeto trabajado aparezcan en positivo.
Otro aspecto de enorme importancia es el acabado final de la escultura. En algunos casos se recurre a la policromía, algo que debió ser bastante habitual en el mundo clásico y en la escultura medieval, a pesar de que las obras hayan llegado a nosotros desprovistas de los colores que las completaban. Además, tal y como hemos apuntado al definir la escultura, el artista juega con las capacidades expresivas del material trabajando en mayor o menor medida las superficies y controlando, de alguna manera, la relación entre el material y la luz.



LA PINTURA

Esta manifestación artística se desarrolla sobre una superficie bidimensional y durante mucho tiempo estuvo concentrada en la manera de fingir la tridimensionalidad o la profundidad de la que carece el soporte sobre el que se practica. Sólo la irrupción es escena de la fotografía conseguirá liberar a la pintura de esta necesidad de captar con fidelidad la realidad circundante y otorgará al artista una mayor libertad en el ejercicio de este arte.

Uno de los aspectos que mejor nos permitirá comprender la pintura y la forma en que ésta se interpreta es la técnica empleada. Las diferencias materiales entre éstas consistentes en el aglutinante, diluyente y pigmentos utilizados determinarán los efectos estéticos y la forma de trabajo de cada una de ellas. Las técnicas pictóricas más relevantes son las siguientes:
  • El fresco: es una de las primeras técnicas pictóricas que aparecen en la historia del arte. Consiste en pintar sobre una sutil capa de yeso o enlucido cuando aún éste está húmedo, por lo que los pigmentos se mezclan con el yeso pasando a formar parte de él. Este fenómeno permite distinguir las distintas partes en que ha sido realizada la obra que reciben la denominación de jornadas.

  • El temple: se consigue a partir de la unión del agua como disolvente con algún tipo de grasa, vegetal o animal, que hace la función de aglutinante. Normalmente se aplica sobre un soporte ígneo, aunque ocasionalmente se recurre a él para retocar la pintura al fresco o para ejecutar con precisión algún detalle.

  • El óleo: supone una verdadera revolución en la historia de la pintura. Surge a partir de la unión del aceite de linaza con los pigmentos minerales, lo cual permite la obtención de un enorme brillo y de un intenso cromatismo que hacen que esta técnica sea apta para la adecuada recreación de la realidad. Casi desde su irrupción en la historia del arte se convierte en la técnica estelar de la pintura. En ocasiones se emplea para retocar la pintura al fresco o al temple, aunque generalmente se lleva a cabo sobre lienzo.

  • La acuarela: el soporte que se emplea es el papel y los colores se diluyen en agua. Se trata de una técnica que debe ser practicada con cierta rapidez, ya que la acuarela se seca muy rápidamente. Es muy apta para la realización de paisajes, puesto que permite captar los distintos tipos de luz en diferentes condiciones atmosféricas.

  • La témpera: el disolvente en este caso también es el agua, lo mismo que en el caso de la acuarela, aunque la diferencia más significativa estriba en el hecho de que en el temple sí se emplea el pigmento blanco. Generalmente se pinta con témpera sobre el papel aunque en ocasiones se utiliza para retocar la pintura mural. 

  • El encáustico: consiste en diluir los colores en cera fundida, lo cual hace que el artista tenga que trabajar en caliente. Con esta técnica se consiguen superficies muy brillantes y satinadas. Se empleó en los retratos del Fayum, durante el periodo copto, que se colocaban sobre los rostros de las momias.

  • La miniatura: deriva del término latino inluminare que significa literalmente "dar luz". El soporte fundamental de la miniatura es el pergamino, obtenido a partir de la piel de los animales, y los colores se muelen con la mayor finura posible y se recurre a la goma arábiga como aglutinante. Esta técnica alcanzó un enorme desarrollo durante toda la Edad Media, desapareciendo con la irrupción en escena de la imprenta.

Otras técnicas que podrían relacionarse con la pintura son el mosaico y la vidriera. El mosaico consiste en la utilización de teselas o pequeños cubos con los que se da color a una imagen previamente trazada sobre una superficie mural o sobre un pavimento. Las teselas que se clasifican en función a su tamaño y pueden ser de piedra en el caso de los mosaicos romanos, o bien de pasta vítrea, lo cual permite conseguir una mayor gama cromática, si nos referimos a la musivaria bizantina.



La vidriera se realiza con fragmentos de vidrio, tal y como su propio nombre indica. Se emplea para cubrir los vanos y experimenta su momento más álgido durante los siglos del Gótico, aunque existen datos que permiten pensar que ésta existió mucho antes. Lo mismo que el mosaico, se parte de un dibujo sobre el que se van cortando los diversos fragmentos de vidrio coloreado que se colocan sobre un esqueleto metálico que recibe la denominación de emplomado. Los detalles como los rasgos de un rostro o los pliegues de las vestiduras se realizan con la grisalla que se aplica con un pincel. En esta técnica tiene un protagonismo absoluto la luz que atraviesa el vidrio y que intensifica los efectos cromáticos del mismo.


Una vez que hemos definido las técnicas que con mayor frecuencia se han utilizado en la historia del arte, habría que enumerar otras cuestiones que permiten comprender una obra pictórica:
  • El color y el dibujo: se trata de dos conceptos fuertemente interrelacionados en la historia de la pintura. Habrá momentos en que el dibujo predomina sobre el color como sucede en la pintura neoclásica, y otros en que se produce el fenómeno contrario como es el caso de la pintura romántica. La preponderancia del dibujo sobre el cromatismo nos habla de un predominio de la razón sobre cualquier forma de expresión emotiva. En el caso de que el color tenga un mayor protagonismo que el dibujo en una obra, habría que analizar si se opta por colores fríos o bien se prefieren los colores cálidos. Los primeros producen sensaciones de lejanía y neutralidad, sugieren el equilibrio y la serenidad, mientras que los segundos nos hablan de la exaltación de las emociones y de la proximidad, tanto física como emotiva. Bastaría comparar los cuadros de Delacroix o de Rubens, protagonizados por intensos rojos, con los de Friedrich en los que los colores fríos despiertan en nosotros una conmovedora placidez detrás de la que se esconde, en muchos casos, una tensión psicológica. Si, por el contrario, el dibujo es el protagonista de la obra pictórica habría que analizar si estamos ante una escena compuesta con líneas rectas que incitan a pensar en el orden y en el equilibrio o bien si se prefieren formas diagonales o curvas que sugieren un cierto dinamismo e inestabilidad.

  • La composición: es la forma en que se disponen los elementos que integran una escena. Podemos estar ante una composición piramidal (El descendimiento de la cruz de Rembrandt), o una estructura cuadrangular en la que las figuras se yuxtaponen produciendo una marcada sensación de equilibrio (Entierro en Ornans de Courbet), o un cuadro en el que coexisten varios ámbitos compositivos (El entierro del conde de Orgaz de El Greco). La composición está fuertemente relacionada con el color y el dibujo, ya que estos dos elementos pueden servir para subrayar la idea que subyace en la composición. Es decir, las manchas de color y la elección de líneas rectas o curvas pueden evidenciar aún más el mensaje que la composición quiere transmitir al espectador. Esta idea se ve muy bien en muchas de las obras de Caravaggio, determinadas por un fortísimo sentido escenográfico en el que todos estos elementos resultan definitivos.

  • La luz: es otro de los grandes protagonistas de la pintura. Ésta puede iluminar globalmente una escena recibiendo el nombre de luz conceptual o bien puede servir para seleccionar objetos precisos o personajes concretos algo que llevado a su extremo se convierte en claroscuro. No se interpreta de la misma forma la luz en una obra de Piero della Francesca que de Rembrandt, ni tiene el mismo contenido simbólico.   

  • La tridimensionalidad: una de las grandes preocupaciones de la pintura durante mucho tiempo, tal y como ya hemos apuntado, es la representación de la tercera dimensión en un plano, algo que se agudiza en todos los momentos de la historia del arte que podemos definir como antropocéntricos. Esa es la razón de ser del schiacchiato de los relieves romanos, de la perspectiva lineal o de la perspectiva aérea del Renacimiento. Con la aparición en escena de la fotografía, la pintura experimenta una liberación que hace que el objeto fundamental de este arte no sea ya la representación fidedigna de la realidad circundante, puesto que una fotografía es insuperable desde este punto de vista. De esta forma el pintor puede recrear y reelaborar en su mente la realidad que le rodea o bien puede practicar una pintura no figurativa que recibe la denominación de abstracción.

  • La temática: son muchos los argumentos que se plasman en la pintura, tantos como inquietudes tiene el ser humano. Una obra puede ser sacra o profana. Puede abordar argumentos mitológicos, recrearse en la naturaleza en todo su esplendor bajo la forma de un paisaje o en la captación de objetos inertes e inanimados, algo que conocemos como naturaleza muerta o bodegón. Puede deleitarse en la representación del ser humano en sus diferentes posibilidades y aspectos, solo o relacionándose con los demás o con su entorno natural, reflejando diferentes inquietudes del hombre. Y todo esto lo hará bajo la perspectiva del momento histórico en que se produce o bajo la óptica del comitente que manda realizar la obra.

El arte y la sociedad de consumo

El arte se halla absolutamente integrado en nuestra sociedad desempeñando un papel de vital importancia. Se ha convertido en algo a lo que todos, de una manera u otra, tenemos acceso, algo que ha dejado de ser patrimonio de unas pocas clases privilegiadas para llegara a la gran mayoría del público. Por otro lado es indiscutible la dimensión económica de la expresión artística: subastas en las que algunas obras alcanzan precios realmente desorbitados, exposiciones que se convierten en verdaderos fenómenos de masas, campañas publicitarias inspiradas en obras de arte significativas de la Historia del Arte, expresiones artísticas que pretenden despertar la curiosidad de la opinión pública y que interesan a los diferentes medios de comunicación, etc.

En esta entrada nos ocuparemos de todos estos fenómenos para poder comprender la importancia que la obra de arte desempeña en la sociedad actual en sus diferentes vertientes, así como de nuevas formas de expresión, nuevos lenguajes incorporados recientemente a nuestro bagaje cultural como el cómic o la fotografía.

Alfons Mucha: Cartel publicitario de los cigarrillos París



1. ARTE Y MERCADO

Durante los últimos años del siglo XX hemos sido testigos de importantes cambios que afectan de un modo directo a la manera en que el arte se inserta en nuestra sociedad. La obra de arte ha adquirido en la actualidad una nueva dimensión convirtiéndose en un bien de consumo que forma parte de un comercio en el que se mueven importantes cantidades de dinero. Los precios oscilan en función de gustos y modas que no siempre son posibles de explicar desde un punto de vista objetivo, a la vez que están sujetos a fuertes oscilaciones que dependen de estos factores. Este aspecto ha contribuido notablemente a cambiar la consideración social del artista ya que algunos de ellos han adquirido dimensiones casi legendarias que los convierte en personajes venerados. Es posible que sea por este motivo que el arte en la actualidad está caracterizado por una marcada individualidad: es difícil hablar de movimientos y corrientes artísticas, cada artista busca caminos propios que le distingan de los demás, se experimenta con nuevas formas de expresión que, frecuentemente, implican la utilización de los medios audiovisuales que ofrece nuestra sociedad tecnológica. Esto va unido a otro aspecto esencial: el artista es finalmente libre, la expresión de sus ideas no está ligada al poder político y religioso como sucedía en otros momentos de la Historia de Arte de los que nos hemos ocupado anteriormente. Las pirámides o los palacios son expresiones de poder, los templos clásicos o las catedrales medievales tienen una rígida función religiosa, lo mismo que la pintura o la escultura que va, frecuentemente, ligada a la arquitectura.

Andy Warhol: Autorretrato

El papel económico que desempeña la obra de arte en nuestra sociedad está íntimamente unido, además, a la aparición de una serie de novedosos fenómenos que analizamos a continuación:
  • Los marchantes: esta profesión nació en el siglo XIX. El marchante representaba al artista cuyas obras implicaban una cierta innovación aunque carecían del apoyo oficial. Son personajes dotados de gran sensibilidad y clarividencia, lo cual les permitía apreciar las obras que suponían una innovación y apoyarlas. Realizan propuestas estéticas que crean opinión y cambian el rumbo de la Historia del Arte.
Leo Castelli

  • Las subastas: son un fenómeno bastante reciente que se remonta al año 1952 en el que se liquidó la colección de Gabriel Cognac. En cierta medida, la subasta sustituye al marchante y se convierte en el ámbito en el que el coleccionista adquiere las obras de arte. Las dos casas de subastas más conocidas y antiguas son Christie's y Sotheby's, ambas inglesas.
Subasta en Sotheby's

  • Las ferias: aumenta considerablemente el número de ferias que se realizan por la enorme cantidad de posibilidades que ofrecen a la comercialización del arte. Desempeñan un papel esencial como escaparate internacional en el que se muestran la tendencias del momento en materia de arte. No sólo son espacios abiertos a los especialistas sino que también se convierten en lugares a los que puede acceder cualquier tipo de público. Algunas de las más interesantes son la Bienal de Venecia, que se inició en 1895, la de Basilea, la de Chicago o ARCO en nuestro país, que cada año se dedica a un país diferente, lo cual nos permite asomarnos a lo que se está realizando en materia de arte en diversos lugares.
ARCO

El retrato del doctor Gachet. Museo d'Orsay. París


  • El coleccionismo: experimenta un increíble desarrollo durante el siglo XX. Los coleccionistas han sido decisivos para establecer qué es determinante para la evolución de la Historia del Arte y qué no lo es. Frecuentemente es un fenómeno que rebasa el simple aspecto económico y puede ser interpretado como el deseo de posesión que crea una obra de arte, su disfrute en soledad. Una de los coleccionistas más importantes del siglo XX fue Peggy Guggenheim, moderna versión de los mecenas del Renacimiento en Italia.
Peggy Guggenheim

Otro aspecto que ha sufrido interesantes variaciones ha sido el tipo de público que consume arte en nuestra sociedad, cada vez más amplio y más participativo. Una misma corriente artística puede atraer a personas de muy diferente formación cultural y extracción social. A propósito de esta idea, es muy interesante la afirmación del sociólogo Pierre Bourdieu quien considera que el único elemento que tienen en común las diferentes personas que se aproximan a la obra de arte en la actualidad es que han recibido una formación durante su infancia que desencadena en ellos una necesidad cultural. Se acortan considerablemente las distancias que separan al artista del espectador, nunca antes han estado tan próximos. Existen varios factores que contribuyen a esta aproximación:
  • La generación de la educación, que permite a un mayor número de personas acceder a la formación en el ámbito artístico y facilita el consumo de los productos culturales.
  • El crecimiento económico en los países desarrollados. Esto supone la creación de un espacio de ocio que se dedica al disfrute de la obra de arte y, en definitiva, a todas las actividades que podríamos denominar culturales.
  • La universalización del arte. Los artistas de nuestro tiempo quieren llegar al mayor número de personas posible, saltando las clases sociales que marcaban claramente el acceso al arte presente en otros períodos de la Historia del Arte. La utilización de nuevas tecnologías con las que todos nosotros estamos familiarizados facilita este objetivo. El happening es una de las expresiones más concretas de esta idea: supone la implicación directa del espectador en la creación y desarrollo de la obra de arte.


2. LA FOTOGRAFÍA

La fotografía nació a finales del siglo XIX y, como ya hemos tenido ocasión de analizar, supuso un cambio decisivo para el desarrollo de la pintura ya que convulsiona de manera general el ámbito artístico. Se descubren nuevos ángulos de visión que los pintores impresionistas, fascinados por este incipiente arte, ensayan en buena parte de sus obras. Un buen ejemplo de ello son algunas de las obras de Degas que rompe con la visión frontal empleada tradicionalmente para inventar nuevos y osados puntos de vista. Por otro lado, el pintor ya no siente la necesidad de reflejar en un lienzo la realidad circundante con asombrosa fidelidad, que en cierto sentido había sido el cometido del mismo durante buena parte de la Historia del Arte, sintiéndose libre para poder experimentar con otras formas de interpretar el arte pictórico.

Los primeros objetivos de la fotografía fueron los monumentos, obras de arte, escenas costumbristas, etc. sin demasiadas pretensiones ni innovaciones desde un punto de vista técnico. Algunas de las fotos más interesantes sobre los monumentos y ciudades españolas realizadas a finales del siglo XIX se deben al fotógrafo francés Laurent. Viajó por la Península ibérica fotografiando monumentos y obras de arte en museos, lugares públicos, palacios, colecciones privadas, etc. con la idea de crear un amplio fondo que más tarde rentabilizaría. También colaboró con otro fotógrafo de origen francés, Lacoste.

En la actualidad la fotografía en nuestro país está representada por artistas de la talla de Alberto García Alix, asociado indisolublemente a los años 80 y caracterizado por su espíritu provocador y su descarnada veracidad; Schommer, todo un experto en el retrato, capaz de captar con extrema simplicidad la personalidad del retratado; Chema Madoz, caracterizado por el lirismo de las imágenes creadas; Ouka Lele, quien se ha hecho famosa por sus fotografías coloreadas, algunas de ellas bellas y originales estampas de Madrid; Humberto Rivas, Joan Fontcuberta, Javier Vallhonrat, etc.

Chema Madoz: Sin título

Humberto Rivas

Sería interminable realizar un elenco de los fotógrafos que han protagonizado la historia de este arte. Algunos de los más importantes fotógrafos de nuestro siglo son franceses como Robert Doisneau (1912-1994), conocido por sus tiernas imágenes infantiles o por la fotografía en la que dos jóvenes se besan en una calle de París; el perspicaz Cartier-Bresson (1908-2004), fundador de la agencia Magnum; ambos serán los retratistas de las calles parisinas envueltas en una aire melancólico y evocador. En Estados Unidos sobresalen Jacob-August Riis, uno de los más fieles retratistas de la miseria en las calles de Nueva York, y Lewis W. Hine, autor de una célebre imagen en la que denuncia la explotación infantil mostrando una niña que trabaja en una fábrica de algodón.

Cartier-Bresson

En la actualidad el panorama internacional de la fotografía está protagonizado por artistas como Sebastián Salgado, sagaz retratista de la realidad de los países menos favorecidos o de todos aquellos que sufren, destacando de manera especial sus imágenes de niños que miran directamente al espectador; Annie Leibowitz retratista de las estrellas cinematográficas, Helmut Newton, Richard Avedon, Herb Ritts, etc.

Sebastián Salgado: El éxodo. Afganistán



3. EL CARTEL. ARTE Y PUBLICIDAD

El cartel surge a finales del siglo XIX como, no sólo una forma de expresión artística, sino también como un modo de divulgación de las ideas, algo que va a tener una continuación a lo largo de todo el siglo XX. El padre del cartelismo es considerado Jules Cheret, cuyas creaciones inundaban las calles parisinas. Algunos de los primeros carteles son obras del genial artista francés Henri Toulouse-Lautrec del que ya hemos hablado. A través de estos carteles el pintor francés divulgaba los espectáculos que tenían lugar en el Moulin Rouge y en los que se repetían siempre los mismos personajes que los protagonizaban. La técnica empleada era la litografía que nos remite a la estampa japonesa con la que presenta ciertos parecidos por la utilización de amplias zonas de color delimitadas por un trazo firme de negro. Más tarde llegarán las obras de Alphons Mucha (1860-1939), que se pueden enmarcar dentro del Modernismo, en las que se anuncian objetos de las más diversas características con un lenguaje plagado de formas orgánicas y envolventes: elegantes insectos, cornisas vegetales que enmarcan productos y escenas, mujeres de refinada belleza elegantemente adornadas que nos remiten por su estética a las obras de Gustav Klimt, y que sirven para divulgar bebidas, obras teatrales, productos cosméticos, etc. Él, precisamente, fue el ilustrador de muchos de los carteles de las obras de Sarah Bernhardt del cual es un buen ejemplo el cartel del Teatro de la Renaissance. En España el cartelismo está representado por una buena parte de los pintores modernistas, de manera especial por Ramón Casas. La etiqueta del Anís el Mono es un diseño de época modernista. Existen antecedentes mucho más primitivos del cartel, por ejemplo en Pompeya y Herculano se han encontrado letreros con mensajes comerciales, o en un mosaico de Ostia que servía de "anuncio" a los navieros de Misua.

Henri de Toulouse-Lautrec

Alpinos Mucha

Durante la Primera Guerra Mundial el cartel seguirá teniendo vigencia empleándose con diversos fines. Uno de los más conocidos es el cartel de James Montgomery Flagg en el que se exaltaba a los jóvenes americanos al reclutamiento. No sólo en los Estados Unidos, sino también en Rusia, el cartel estuvo ligado a objetivos claramente políticos, en ocasiones para luchar contra el régimen establecido, ligado íntimamente a la izquierda soviética. En la China maoísta se recurre al cartel para dar a conocer las ideas del régimen imperante. 

James Montgomery Flagg

Actualmente el cartel, ligado a la fotografía, se ha convertido en arte de nuestro paisaje cotidiano. Las calles de las grandes ciudades están llenas de enormes vallas publicitarias que incitan al consumo. En algunos casos existe una intención claramente estética mientras que en otros el lenguaje al que se recurre es la provocación a través de la cual se estimula nuestro interés. El hecho de que nuestra cultura sea, fundamentalmente, visual hace que la capacidad de sorprender al consumidor se reduzca. Algunas campañas publicitarias se convierten por su carácter escandaloso, en objeto de nuestro interés. Basta recordar algunas de las campañas de Benetton, obra del fotógrafo italiano Oliviero Toscani, por ejemplo aquella en la que condenados a muerte americanos mostraban prendas de la citada marca, o la implicación de esta casa en la lucha contra el sida o la igualdad racial. La aportación y el sentido del cartel publicitario se puede resumir en tres conceptos fundamentales:
  • Se trata de una forma de manifestación de la imagen pública en lugares comunitarios.
  • Supone un instrumento público de persuasión.
  • Más allá de su carácter publicitario, muchos de estos carteles están dotados de una intención estética y artística. Pueden ser interpretados como explosiones de color y alegría, intensos impactos visuales en las grandes urbes, frecuentemente grises y apagadas. 
Cartel publicitario de United Colors of Benetton



4. EL CÓMIC

El cómic presenta desde su nacimiento, al que nos referiremos algo más adelante, una serie de características fijas que se repiten de manera casi constante:
  • Se enmarca en una viñeta.
  • Dentro de la viñeta aparecen la imagen, el mensaje irónico, y generalmente, también el mensaje lingüístico.
  • Muchas veces el mensaje lingüístico se incorpora en una especie de "bocadillo" que se denomina balloon (globo o nube).
  • El tono de voz o la expresión de alegría o la tristeza se refleja mediante el grosor del trazo o el tamaño de la letra. En ocasiones el texto puede sustituirse por exclamaciones, puntos suspensivos o signos de interrogación que refuerzan la idea de perplejidad o sorpresa del personaje. En este sentido un elemento esencial del cómic es la onomatopeya.
  • En general, los personajes de cómic aparecen fuertemente caracterizados desde un primer momento admitiendo escasas variaciones en este sentido. Basta pensar en Mafalda, Andy Capp, Asterix y Obelix, etc. siempre determinados por una misma conducta que les da carácter de personajes, o por un mismo tipo de vestido.
Alfons Figueras: Aspirino y Colodión

El cómic no surge de una manera esporádica, son muchas las expresiones artísticas a lo largo de la Historia que, de alguna manera, preconizan la aparición del mismo. Los jeroglíficos egipcios narran la forma seriada la historia de los dioses o informa sobre la manera en que se debían celebrar los ritos funerarios, los retablos, sobre todo en periodo gótico, son narraciones de las vidas de personajes de la Biblia, de santos o de la vida de Jesucristo y la Virgen. Más adelante, en el siglo XIX, de la mano de Daumier surge la caricatura, que se convierte en punto de partida más que indispensable para la aparición en escena del cómic.

Fresco Egipcio

Los orígenes más inmediatos del cómic se remontan a las páginas del diario norteamericano World, en 1895, cuando en medio de la rigurosa información de la actualidad, aparecía un pequeño personaje  llamado Yellow Kid, creación de Richard Felton Outcault. Se trataba de un niño oriental que aparecía siempre vestido con una especie de túnica, en la que frecuentemente se escribía el texto, calvo y con grandes orejas. Desde un pequeño espacio que se le dedicaba cada domingo se narraban sus, muchas veces, tristes aventuras en un suburbio neoyorkino. Uno de los principales problemas a los que se enfrentaba este nuevo lenguaje era la dificultad para incorporar el texto, que debía ser muy breve, y unirlo al dibujo.

Algo más tarde, en 1905, aparece en la escena del cómic otro nuevo personaje: Nemo, obra de Wilson Mac Cay, un niño de más o menos cinco años, cabellos rizados, expresión sorprendida y perteneciente a una familia acomodada que se embarca en una serie de aventuras.

El desarrollo del cómic trajo consigo algunos personajes de gran familiaridad para todos nosotros: Tintín, Mafalda, Mortadelo y Filemón, el Capitán Trueno, Superman, Snoopy, Astérix y Obelix, Dick Tracy, Mickey Mouse, Capitán América, Roberto Alcázar y Pedrín, etc.

Hergè: escena de cómic de Tintín

Ub Iverks: Mickey Mouse




5. ARTE EN INTERNET

Internet se ha convertido en un poderoso medio de comunicación al que todos tenemos acceso y que nos permite asomarnos al mundo para recibir información proveniente de los lugares más remotos del mundo. En las páginas web podemos encontrar información de todo tipo y sobre las cosas más variadas. El arte, como no podía ser de otra manera, se ha servido de este poderoso medio para divulgar las ideas. Así han comenzado a proliferar en la red espacios dedicados al arte, los museos, las ferias, exposiciones temporales, los festivales de cine, etc.

Son particularmente interesantes las páginas de los museos, en las que incluso los más pequeños tienen en la actualidad un sitio en el que se nos ofrece información sobre las características de su colección, los horarios, los precios, las actividades que se organizan periódicamente, se reconstruyen virtualmente obras de arte que ya no se conservan o se ofrecen recorridos que nos aproximan al museo sin necesidad de movernos de nuestras casas, lo cual se debe fundamentalmente a la enorme evolución experimentada por los medios infográficos.

Los diseños de estas páginas web suelen estar en concordancia con la naturaleza del museo, de esta manera no encontraremos las mismas las características en el sitio dedicado a una colección de arte contemporáneo que en el de un museo de arte clásico.

En general, los museos de arte contemporáneo presentan una mayor necesidad de innovar, una estética más vanguardista que tiende a la síntesis. A pesar del interés que despierta en nosotros la visita virtual de estos espacios, nunca será tan rica como la contemplación directa de la obra de arte. Es una herramienta más de la que servirse a la hora de organizar o contemplar la visita de un museo o un centro artístico y nunca se debe convertir en un sustitutivo de la misma.

Página web del Museo del Prado

En este apartado te ofrecemos algunas de las páginas más interesantes en las que puede entrar y que te ayudarán a comprender cómo el fenómeno artístico se ha adaptado a una nueva forma de expresión como es la informática:
  • Museo Nacional Centro de Arte Contemporáneo Reina Sofía (MNCARS) de Madrid: http://museoreinasofia.es. Se trata de una página de fácil navegación que ofrece un diseño ágil y sintético. El diseño de la página es sencillo, así como el tipo de letra. Podemos visitar los fondos de la colección y recibir información acerca de las obras más importantes, así como de las corrientes artísticas en las que se enmarcan y los artistas más significativos de los diferentes movimientos que están contenidos en la colección. Uno de los apartados más interesantes es el que se dedica a las publicaciones que se realizan periódicamente sobre el arte contemporáneo.
Página web del Museo Nacional Centro de Arte Contemporáneo Reina Sofía de Madrid

  • British Museum de Londres: http://www.britishmuseum.org. Ésta es una de las páginas de museos más completas que existen en la actualidad. Se aporta información sobre la vastísima colección que se expone de modo permanente, así como de las exposiciones temporales que se organizan periódicamente, las actividades del gabinete de educación y los servicios orientados a las personas que tienen discapacidades tanto físicas como psíquicas.
Página web del British Museum de Londres

  • ICOM (International Council Of Museums): www.icom-ce.org. En esta página se ofrece información sobre la normativa que se refiere a los museos, así como los cursos y congresos que esta institución promueve. Existe un link desde el que podemos acceder a los más destacados museos de todo el mundo.
Página web del ICOM

  • UNESCO: www.unesco.org. El organismo internacional encargado de la protección del patrimonio histórico-artístico tiene su propia página web en la que se habla sobre los programas internacionales que se están llevando a cabo, los cursos organizados en materia de patrimonio histórico-artístico, publicaciones, aspectos legislativos, etc.
Página web de la UNESCO

  • Festivales de cine: algunos de los sitios web más destacados que informan sobre los festivales cinematográficos son el Festival de Cannes (www.festival-canes.fr) y el Festival de San Sebastián (www.sansebastianfestival.com).
Página web del Festival de San Sebastián

Además de estas páginas, en las que se reflejan los contenidos y cometidos de instituciones que tienen una existencia real, existen páginas de espacios ficticios que no tienen una correspondencia en la realidad, museos virtuales, así como de espacios dedicados a un pintor o artista. Existe, por ejemplo, un importante número de páginas dedicadas al pintor holandés Vincent Van Gogh, en las que es posible encontrar reproducciones de su producción artística. En cierto modo este tipo de espacios virtuales tienen como cometido esencial la necesidad de modificar el concepto tradicional de museo y de responder a las necesidades de una nueva sociedad que avanza a un ritmo vertiginoso.





A FONDO

EL COLECCIONISMO DE PEGGY GUGGENHEIM

Uno de los grandes personajes del coleccionismo en el siglo XX fue la americana Peggy Guggenheim. Era la sobrina de Salomón Guggenheim y se caracterizó por su fuerte y decidida personalidad lo que hizo de ella una mujer poco convencional. Podríamos definirla como un personaje excéntrico que no encaja demasiado bien en su entorno familiar. Desde muy joven demostró un gran interés por el arte, lo que la aproximó a algunos de los más representativos artistas de nuestro siglo, especialmente a los artistas europeos. En Londres abrió una galería de arte y, algo más tarde, se decidió a realizar un museo en los Estados Unidos a donde trasladó una buena parte de las obras que había adquirido en Europa. Posteriormente fijó su residencia en Venecia, para lo cual abrió un palacio llamado Vernier dei Leoni que se enmarca en uno de los más importantes barrios venecianos: Dorsoduro. Allí permaneció hasta el día de su muerte.


Los museos de la colección Guggenheim son:
  • Nueva York: realizado por el arquitecto Frank Lloyd Wright del que ya hemos tenido ocasión de hablar. Uno de los aspectos esenciales de este museo, al margen de la excepcional colección, es que el edificio fue ideado de manera premeditada para albergar una colección que sería visitada por un importante número de personas. Se trata de una grandísima estructura anular que se recorre gracias a una rampa. En esta misma ciudad se realizó una segunda sede de la fundación Guggenheim que se sitúa en el Soho y que es obra del arquitecto japonés Arata Isozaki.
  • Venecia: en la actualidad es un museo pero en su momento fue la residencia de Peggy Guggenheim. Se trata de un palacio del siglo XVIII llamado Vernier dei Leoni, en el barrio veneciano de Dorsoduro. La estructura no es la más adecuada para un museo pero su interés reside en que nos da una idea fiel de lo que era el entorno de la coleccionista, puesto que las obras se conservan en muchos casos en los lugares en los que ella los ubicó. La parte posterior del museo se abre a un canal veneciano. En 1979 la fundación invirtió una importante cantidad de dinero para restaurarla. En la actualidad se proyecta adquirir un palacio renacentista adyacente, lo cual permitiría aumentar el espacio expositivo.
  • Otras sedes: además de éstas que ya hemos indicado anteriormente, la colección Guggenheim dispone de otras sedes de menor importancia aunque igualmente interesantes. Nos referimos a Berlín en la que no existe colección permanente pero sí se realizan exposiciones periódicas con la colaboración de la Deutsche Bank. Por último Bilbao, en un espectacular edificio de Frank Gehry, con una pequeña parte de la colección de la Fundación Guggenheim. En ella se pueden visitar obras de Dalí, Rothko, Delaunay, Arte Povera, colosales esculturas de Serra, algún móvil de Calder, artistas como Susana Solano, etc.
La fundación tiene una interesante página web en la que se ofrece información sobre las diferentes sedes: la colección permanente, las exposiciones temporales, actividades organizadas por la fundación, becas, etc. (www.guggenheim.org).





BREVES APUNTES

Algunos de los marchantes más importantes de la Historia del Arte han sido Paul Durand-Ruel (1831-1922), quien apoyó a los impresionistas en un momento en que eran abiertamente rechazados, Daniel-Henry Kahnweier (1884-1973) representante de la pintura de Juan Gris y Pablo Picasso, es decir, fuertemente ligado al movimiento Cubista, y Leo Castelli, fallecido en 1999, decisivo en el arte de vanguardia.

Uno de los cuadros más caros de la Historia del Arte es El retrato del Doctor Gachet, de Van Gogh, vendido por 82.500.000 dólares, en tercer lugar se sitúa una obra de este mismo pintor, Los lirios, vendido en 59.900.000 dólares, seguido por Las bodas de Pierrette y El sueño, ambas de Pablo Picasso.



CITAS

Ouka Lele
"Ouka Lele es pintora. Pintora figurativa que, a diferencia de tantos artistas contemporáneos que utilizan la fotografía para situarse en la historia de la pintura y sin embargo practican una especie de pictorialismo, ella ha decidido pintar, esencialmente con acuarela, sus imágenes en blanco y negro que adorna gracias a un meticuloso uso del pincel, con los colores que le convienen y que no son, cosa que visiblemente ella lamenta, los que se pueden encontrar en la realidad".
Christian Caujolle

"Cuando una fotografía resuelve el enigma, la gracia se termina de un modo inmediato, arrastra consigo su propia destrucción, no interesa. Alguien dijo que una buena fotografía ha de ser siempre un lugar de partida, no un punto de llegada. Una proposición, por tanto, más que una suposición. La fotografía que desvela el misterio tiene el mismo interés que el problema cuya solución se conoce de antemano. Destruido lo mágico queda sitio, a lo sumo, para la filigrana hueca".
Carlos Canovas 



GLOSARIO

Cartel
Se trata de una palabra que deriva del término latino cartel que significa papel.

Astérix y Obelix
Desde el principio los autores de Astérix, Goscinny y el dibujante Oderzo delinean sus personajes, los definen perfectamente, a través de una serie de características peculiares, figurativas y psicológicas, que no sufren variaciones a lo largo de las más diversas y emocionantes aventuras. Y sobre todo delinean un contexto geográfico: la aldea, y eligen una coordenada temporal: 50 años antes de Jesucristo. Entonces los romanos dominaban el mundo.

martes, 10 de mayo de 2016

El museo y la conservación de bienes culturales

En esta entrada nos ocuparemos de varios aspectos que centran la actualidad del hecho artístico. Por un lado, se analiza un fenómeno como la aparición de los museos, las funciones que desempeñan y de qué manera la obra se integra en los mismos, para tratar de aprender a valorar el papel que el museo ha adquirido en la sociedad actual. Además se expondrán las posturas más importantes y representativas dentro del ámbito de la restauración, un terreno bastante novedoso, pero de una importancia fundamental por cuanto define la postura que el hombre actual toma con respecto al posicionamiento de nuestro patrimonio.

En definitiva, el fin de este apunte es concienciar de la importancia que la obra de arte tiene como bien social y cultural.

Interior del Centro de Arte Contemporáneo Georges Pompidou. París




1. EL MUSEO

1.1. El museo y la museología. Una breve historia de los museos

Además de adentrarnos en el estudio de una ciencia relativamente joven, como es la museología, debemos establecer los límites de este término. El origen de la palabra museología es griego, procede de mouseion que significa "casa de las musas" y que derivó en la palabra latina museum. En sus textos, Estrabón nos habla del Mouseion de Ptolomeo, ubicado en los palacios reales de Alejandría. Este espacio incluía, además de una biblioteca, un observatorio astronómico, un jardín botánico y una interesante colección zoológica. El ICOM (International Council of Museums) define el museo de la siguiente manera: "La palabra museo designa todo establecimiento permanente, administrado en beneficio del interés general para conservar, estudiar, hacer valer por medios por medios diversos y, sobre todo, exponer para deleite y educación del público, un conjunto de elementos de valor cultural: colecciones de objetos artísticos, históricos, científicos y técnicos, jardines botánicos y zoológicos y acuarios. Las bibliotecas públicas y los centros de archivos que mantienen salas de exposición de manera permanente, serán asimilados a los museos".

Frank Lloyd Wright: Museo Guggenheim. Nueva York


Uno de los primeros que se encargaron de estudiar el museo y de darle forma a esta ciencia tan reciente que es la museología, fue Georges Henri Rivière, quien sería director de L'École du Louvre entre 1930 y 1950 y, más tarde, director del ICOM.

Desde un momento temprano en la historia, el hombre ha sentido la necesidad de guardar una serie de objetos que, por su singularidad o su particular belleza, despertaban un interés especial en él. 

Las primeras referencias del museo nos llegan de Grecia, en donde se crean espacios como la pinacoteca. Se sabe, gracias a los datos que Pausanias ofrece en sus textos, que en la Pinacoteca de Atenas se guardaban los cuadros del pintor griego Polignoto de los que no se conserva ninguno, pero que Pausanias nos describe con detenimiento. En Roma, lo mismo que en Grecia, existía una gran afición por el coleccionismo, que en este caso adquirió una dimensión privada. No sólo se guardaban los objetos en función de su valor estético, sino que, además, poseían el valor añadido de ser botines de guerra.

Durante la Edad Media las iglesias eran importantes espacios en los que se guardaban objetos que tenían un interés desde el punto de vista de la fe o a los que se les atribuían poderes mágicos. Esto último explica la presencia en muchas iglesias medievales de curiosas reliquias traídas de los Santos Lugares. Los tesoros más importantes de todo el Medievo son los de San Marcos de Venecia y Saint Denis en Francia. En España, dos de los conjuntos más interesantes son los de la Colegiata de San Isidoro de León y el de la Catedral de Oviedo.

Durante la Edad Moderna el coleccionismo alcanzó una gran importancia. En el Renacimiento, las ricas familias nobles buscaron obras de arte procedentes de la antigüedad clásica. Algunas de estas colecciones, como la de los Medici en Florencia, son el germen del que hoy se puede considerar, sin duda alguna, uno de los museos más importantes del mundo: la galería de los Uffizi. De la misma manera, la colección del rey Francisco I de Francia será el punto de partida del Museo del Louvre y, la de Carlos V y Felipe II, del Museo del Prado.

Galería Nacional de Canadá



1.2. La función de los museos de obras de arte

Los museos desde un primer momento han desempeñado una serie de funciones que con el paso del tiempo se han ido perfilando. Nosotros nos ocuparemos en este apartado de las obligaciones que todo museo de arte tiene atribuidas:
  • Coleccionar
En los museos se custodian las obras de arte, se estudia acerca de la manera más conveniente de exponerlas y se busca el mecanismo más conveniente de exponerlas y se busca el mecanismo más apropiado para su difusión. El gran problema surge al cuestionarse qué es digno de ser conservado y qué es lo que ha de constituir los fondos permanentes del museo. Normalmente, las piezas que integran estos fondos proceden de sus depósitos, son adquiridas por el propio museo o bien son donadas por alguna entidad de carácter privado.
  • Investigar e identificar
La investigación es otro de los cometidos esenciales del museo, que tiene lugar cuando éste adquiere una pieza nueva o bien cuando cuenta entre sus fondos con alguna obra de arte sobre la que se desconocen algunos aspectos, como la identidad del autor, la cronología, etc. Esto afecta, sobre todo, a los casos en que exista sospecha de falsificación, especialmente si el museo está interesado en la adquisición de una nueva obra de arte y se alberga alguna duda sobre su autenticidad.

Museo Dalí. Figueras

  • Documentar
En todos los museos debe haber constancia documental de la existencia de las obras de arte que constituyen sus fondos. Para esto cuentan con el registro (en el que se inscriben todas las obras que entran en el museo), el inventario (listado más o menos completo de las obras que integran los fondos museísticos) y el catálogo (ficha en la que se recoge una información más amplia sobre las piezas).
  • Conservar y restaurar 
El museo es una de las piezas claves dentro del proceso de conservación de las obras de arte. Para ello, el recinto museístico deberá contar con las medidas de seguridad apropiadas que garanticen que esos bienes de los que hemos sido herederos, llegarán a nuestros descendientes, al menos, en el mismo estado en que se encuentran en la actualidad. Esto implica que las condiciones de luz, temperatura y humedad en las que se encuentran han de ser siempre las más idóneas. En el caso de que alguna obra se halle en mal estado de conservación se restaurará, pero siempre desde un principio de respeto absoluto a la situación original de la obra. Se deberá tratar, en la medida de lo posible, de que la restauración sea reversible.
  • Exhibir y educar
El museo ha de ser, ante todo, un lugar abierto al público y, por tanto, la arquitectura, como receptáculo de las piezas museísticas que se van a mostrar, desempeña un papel fundamental. El museo se adecuará a una de las funciones más importantes para la que ha sido pensado: la exhibición de obras de arte.

La relación que se establece entre el museo y el público es una de las funciones que más interés despierta en la actualidad. El museo tiene en sus manos la posibilidad de educar al visitante, de romper con la idea de visitante pasivo mediante la organización de reuniones periódicas, aumentando el número de visitas guiadas o bien llevando a cabo otro tipo de actividades formativas de divulgación, de las que se encarga el departamento pedagógico.

Rafael Moneo: Interior del Museo de Arte Romano. Mérida




2. LA CONSERVACIÓN Y RESTAURACIÓN DE BIENES CULTURALES

Restaurar no es otra cosa que tratar de recuperar el aspecto original de una obra de arte del pasado del que ha sido despojado por el paso del tiempo.

Una de las primeras intervenciones en este sentido es la de Rafael Stern y Giuseppe Valadier, quienes se ocuparon de la restauración del Coliseo y de algunos Arcos del triunfo que, en bastante mal estado, se conservaban en Roma.

El siguiente paso lo dio Viollet-le-Duc quien, como buen romántico, centró su interés en las obras góticas, de las que Francia tenía un buen número. A través de un exhaustivo estudio de la arquitectura gótica, rehizo gran parte de las catedrales góticas francesas, tratando de devolverles un estado ideal, lo que él denominó su forma prístina. Esta manera de entender la restauración suscitó múltiples controversias entre los que interpretaban la intervención violletiana como un "falso histórico". En nuestro país, uno de los ejemplos de este tipo de restauración es la Catedral de León.

La reacción a las teorías de Viollet está representada, entre otros, por la personalidad de John Ruskin, defensor de la veracidad histórica del monumento. Al igual que Viollet, consideraba que la Edad Media es el momento más brillante de la Historia del Arte, pero a diferencia de aquél, concedió una gran importancia a los oficios artesanos, que en la Revolución industrial se habían olvidado. En este sentido, Ruskin está estrechamente relacionado con el Arts and Crafts. Frente a la reconstrucción en estilo que hace que, en muchas ocasiones, resulte prácticamente imposible establecer qué es lo original de la arquitectura y qué lo que ha sido restaurado, Ruskin propondrá la conservación y, en casos extremos, la consolidación que evite que el edificio termine por derrumbarse. Estas ideas son extensibles a la restauración del resto de las manifestaciones artísticas.

Coliseo, donde se puede apreciar la intervención de Stern y Valadier. Roma

Una de las teorías más interesantes sobre restauración es la de Camillo Boito. Se mantiene muy cerca de las ideas de Ruskin pero admite, bajo ciertas premisas, la posibilidad de restaurar. Las ideas de Boito se han denominado Restauro scientifico. Criticó abiertamente todas las intervenciones que en algún momento tratasen de falsear la obra de arte y, en este sentido, rechazó totalmente el "falso histórico". Este estudioso estableció ocho puntos fundamentales para realizar una restauración arquitectónica:
  • Diferencia de estilo entre lo antiguo y lo nuevo.
  • Diferencia de materiales en sus fábricas. 
  • Supresión de molduras y decoración en las partes nuevas.
  • Exposición de las partes materiales que hayan sido eliminadas en algún lugar contiguo al monumento restaurado.
  • Incisión de la fecha de la actuación o de un signo convencional en la parte nueva.
  • Epígrafe descriptivo de la actuación fijado al monumento.
  • Descripción y fotografías de las diversas fases de los trabajos depositadas en el propio monumento o en un lugar público.
  • Notoriedad visual de las acciones realizadas.
Esta teoría es la que más se aproxima a lo que más tarde se establecerá en la Carta de Atenas (1931) y en la Venecia (1964).

El continuador de la teoría de Boito es Gustavo Giovannoni. Una de sus máximas preocupaciones fue la integración del monumento en el medio urbano.


Catedral de León



A FONDO

EL MUSEO DEL LOUVRE
(PARÍS)

El Museo del Louvre es uno de los centros artísticos más importantes del mundo. Sus raíces se hunden en el tesoro de la corona que el rey Carlos V guardaba en la fortaleza construida por Felipe II Augusto, en el siglo XII. Hasta el reinado de Francisco I (siglo XVI), estas obras habían caído en el olvido, pero con la llegada de este monarca, tanto el coleccionismo como el arte alcanzarán un auge espectacular.

Francisco I reunió en su corte a los creadores más significativos de la Francia de la época, y llamó a creadores de la talla de Leonardo da Vinci o Benvenuto Cellini. Todas las obras de arte cuya creación promovió fueron trasladadas al Castillo de Fontainebleau. Mucho se comentaba por aquel entonces sobre esta excepcional colección, pero muy pocos eran los privilegiados que habían podido contemplarla de cerca.

Más tarde, el rey Luis XIV en el siglo XVII encargó a su ministro Colbert que se ocupase del conjunto, ante lo cual, este ministro de Finanzas decidió trasladarlo al Palacio del Louvre y se hizo con colecciones privadas realmente importantes, como la del banquero Jaback, el cardenal Mazarino y el abad Marolles. Una parte de este importantísimo repertorio artístico, alrededor de cien pinturas, se llevó al Palacio de Luxemburgo de París, donde, dos días a la semana, eran visitadas por un gran número de personas. El pensamiento ilustrado, _especialmente Diderot, para el que la educación y el acceso popular a la cultura eran elementos fundamentales de civilización_, y la Revolución Francesa, contribuyeron notablemente a aproximar estos fondos al público.


El conde D'Angivillier, además de trasladar las obras al lugar en que se encuentran en la actualidad, es decir, al Palacio del Louvre (1793), fue uno de los primeros que se ocupó de que las piezas que integraban la colección, que más tarde formaría lo que hoy conocemos como Museo del Louvre, se organizase de una manera sistematizada. Para ello aplicó unos criterios museográficos bastante aproximados a los que se tienen en la actualidad, mandó efectuar los primeros catálogos y adquirió nuevas obras que completaban las carencias que la colección tenía. Las campañas de Napoleón a Egipto, la colección del cónsul británico Salt adquirida por Champollion en 1826 y las obras traídas por Mariette del Serapeum convirtieron al Museo del Louvre en uno de los que mayor número de obras de arte egipcias atesoran.


La ampliación de los fondos del Louvre ha sido una prioridad para la mayoría de los gobiernos de Francia, quienes han afrontado este cometido con inteligencia, potenciando las donaciones y haciendo que el sistema fiscal permita el pago de impuestos con obras de arte.

El último paso lo dio François Mitterrand, presidente de la República Francesa desde 1981, haciendo que el Ministerio de Economía, que se ubicaba en el mismo palacio del Louvre, fuese trasladado a otro lugar con la finalidad de que este espacio fuese ocupado íntegramente por el museo. Este aspecto constituía uno de los elementos prioritarios de su proyecto electoral. Además se ideó que en este palacio se pudiese visitar un Museo de Artes Decorativas, un Museo del Vestido y de la Moda y la Escuela del Louvre, en la que se forman miles de estudiantes en las diversas disciplinas artísticas y que destaca por ser una de las instituciones más brillantes en la enseñanza de la museología, ciencia que tuvo en Francia un importante punto de partida.

Mitterrand se ocupó de manera especial por solucionar los grandes problemas de acceso al interior que presentaba este edificio, uno de los más visitados del mundo. Eligió personalmente a I.M. Pei, un arquitecto de nacionalidad norteamericana y de origen chino, que se ocupó de la remodelación del museo en 1984. Éste diseñó una pirámide de cristal que se erige en centro del patio y por la que se accede al interior del museo. Gracias a ella llegamos a un impresionante vestíbulo en el que se encuentran las diferentes galerías en las que organiza el espacio museístico. Las paredes de cristal permiten, por un lado, inundar de luz la entrada que acoge y envuelve al espectador y, por otro, se consigue que no perdamos de vista ningún punto del patio debido a su transparencia. Se consigue de esta manera algo tan difícil como la integración de la arquitectura actual, con materiales igualmente actuales, en un espacio realizado muchos siglos antes, en el que han trabajado grandes decoradores, escultores y arquitectos entre los que se encuentran Metezau, Androuet du Cerceau, Lemercier, Perrault, Le Vau, Fontaine, Visconti, etc. Esta obra, en el momento de su construcción desencadenó una terrible polémica, pero hoy es del agrado de la gran mayoría del público.

El Louvre es un museo con una gran historia a sus espaldas, pero, al mismo tiempo, con una decidida y ejemplarizante vocación de futuro.

Interior de la Pirámide del Louvre
   


CITAS

"El museo forma también parte de estos palacios reales; tiene un paseo público, una exendra con asientos y una especie de sala común de los hombres de estudio que forman el Museo. Este grupo de hombres no solamente mantiene la propiedad en común, sino que también tiene un sacerdote a cargo del museo (...)".
Estrabón

"El patrimonio se ha transformado en un medio en manos de los poderes públicos, los que en su afán por poner en práctica una política "cultural", obligan a exponer, o mejor aún, a exhibir obras, y se niegan a tomar en consideración los riesgos que éstas corren".
Gaël de Guichen

"Del mismo modo que ningún poeta se pondría a terminar los versos incompletos de la Eneida, ningún pintor a terminar un cuadro de Rafael, ningún escultor a terminar un cuadro de Rafael, ningún escultor a terminar una estatua de Miguel Ángel, así ningún arquitecto debería consentir en completar una catedral".
Didon

"La teoría de Camillo Boito ha venido siendo considerada modernamente, lo que sienta de modo definitivo criterios prudentes y científicos".
Antón Capitel